martes, 25 de marzo de 2008

Resultado Encuesta sobre ONEMI Tarapacá



Debido al impacto que provoco nuestra encuesta, y a la serie de email que hemos recibido consultando sobre este servicio, es que hemos preparado lo siguiente:





¿Qué es un plan de emergencia?


"El plan de emergencia es la planificación y organización humana para la utilización óptima de los medios técnicos previstos con la finalidad de reducir al mínimo las posibles consecuencias humanas y/o económicas que pudieran derivarse de la situación de emergencia".


De la definición se desprende que el plan de emergencia persigue optimizar los recursos disponibles, por lo que su implantación implica haber dotado previamente al edificio de la infraestructura de medios materiales o técnicos necesarios en función de las características propias del edificio y de la actividad que en el mismo se realiza. Ello a su vez comporta haber previamente, realizado una identificación y análisis de los riesgos o deficiencias del edificio, imprescindible para conocer la dotación de medios de prevención-protección que se precisan en el mismo.


Sólo en este momento, cuando el edificio está correctamente equipado, cabe hablar de la implantación de un plan de emergencia si queremos tener la certeza de que éste será operativo y eficaz. En caso contrario, dispondremos de un documento más o menos correcto, pero ineficaz en su puesta en práctica.


¿Qué hacer en el período de tiempo que forzosamente va a transcurrir hasta que el edificio se equipa con las instalaciones necesarias? En ese período, el plan de emergencia que debe existir aunque sea con carácter de provisionalidad, debe contemplar tal situación y adecuarse a tales carencias, de modo que las actuaciones que en el mismo se prevean se adecuen a lo que se pueda hacer en función de "lo que se cuenta y en qué condiciones".


¿Dónde se debe implantar un plan de emergencia?


A tal pregunta responde en parte la legislación vigente, que a nivel estatal, exige a determinado tipo de edificios o actividades a implantar plan de emergencia. Es el caso de hospitales, hoteles, locales de espectáculos, recintos deportivos, etc.


¿Y en aquellos edificios o actividades para los que no existe reglamentación que les obligue?
En tales supuestos, la implantación de un plan de emergencia es siempre exigible técnicamente cuando se trate de instalaciones en que se dé una grave situación de riesgo o bien en instalaciones en que aún no siendo elevado el nivel de riesgo, si podrían serlo las consecuencias humanas o materiales que se producirían.


La casuística de siniestros nos confirma que este supuesto se da en los edificios y espacios de pública concurrencia, independientemente de la actividad que en ellos se realice y de su nivel de riesgo intrínseco, ya que un siniestro en este tipo de edificios presenta un elevado riesgo de consecuencias graves para las personas que los ocupan.






Factores de riesgo que justifican la implantación de planes de emergencia en edificios y espacios de pública concurrencia


Junto a factores de riesgo comunes a otras actividades e instalaciones, en estos edificios y/o espacios concurren factores de riesgo propios y, en cierto modo, presentes en todos ellos. De entre ellos cabe destacar por su incidencia e importancia:



· Densidad de ocupación: dificulta el movimiento físico y la correcta percepción de las señales existentes, modificando la conducta de los ocupantes. A su vez, condiciona el método idóneo para alertar a los ocupantes en caso de emergencia, ya que si la notificación de la emergencia comportara reacciones de pánico agravaría el problema.


· Características de los ocupantes: en general, estos edificios están ocupados y en ellos coexisten personas con enorme variedad entre ellas (edad, movilidad, percepción, conocimiento, disciplina, etc.).


· Existencia de personal foráneo: son edificios ocupados en la casi totalidad de su aforo por personas que no los usan con asiduidad y, consiguientemente, no están familiarizadas con los mismos. Ello dificulta la localización de salidas, de pasillos o vías que conducen a ellas o de cualquier otra instalación de seguridad que se encuentre en dichos locales.


· Limitaciones lumínicas: se usan frecuentemente en oscuridad o con niveles de iluminación baja. Da lugar a dificultades en la percepción e identificación de señales, accesos a vías, etc.. y a su vez incrementa el riesgo de atropellos, caídas, empujones.


La existencia de alguno de estos factores o la conjunción de todos ellos junto a otros que puedan existir, previsiblemente darían lugar a consecuencias graves o incluso catastróficas ante la aparición de una situación de emergencia, si previamente no se ha previsto tal evento y se han tomado medidas para su control.


Redacción e implantación de un plan de emergencia


Si bien la propia legislación que obliga a elaborar e implantar un plan de emergencia, acostumbra a dar unas directrices sobre como hacerlo y fija unos mínimos sobre sus características y contenido, éstas son generalmente insuficientes para su implantación con garantías de eficacia.


Para dar respuesta a la cuestión de ¿cómo elaborar un plan de emergencia?, en esta NTP acudimos a la Orden de 29.11.1984 del Ministerio del Interior. Protección Civil. "Manual de Autoprotección. Guía para el desarrollo del plan de emergencia contra incendios y de evacuación de locales y edificios".



Aunque su utilización es voluntaria y así lo refleja en su disposición 1ª la propia orden, su aplicación facilita significativamente los pasos a realizar para evaluar el riesgo, redactar e implantar un plan de emergencia. Procedemos seguidamente a desarrollar y comentar la citada Orden.


El manual de autoprotección se estructura en cuatro documentos que cubren cuatro fases para su correcta aplicación:


· Documento 1: evaluación del riesgo.
· Documento 2: medios de protección.
· Documento 3: plan de emergencia.
· Documento 4: implantación.


Se analiza seguidamente el contenido de cada uno de los documentos.



¿Existe Riesgo?


Chile es considerado uno de los países más activos sísmicamente, debido a su ubicación en el Cinturón de fuego del Pacífico. Gran parte del territorio continental yace junto a la zona de subducción de la Placa de Nazca bajo la Placa Sudamericana. Al sur del istmo de Ofqui, en la Región de Aisén, la subducción es producida por la Placa Antártica, la cual lo hace a menor velocidad que la de Nazca y, por ende, es menos activa sísmicamente. En los territorios insulares, la sismicidad también es importante, debido a la formación de placas de menor grado en la isla de Pascua y el archipiélago de Juan Fernández debido a la triple unión entre las placas Pacífica y de Nazca.


A lo largo de su historia, diversos terremotos han azotado al país, reconfigurando su geografía física y humana, siendo probablemente el tipo de catástrofe natural más dañino que ocurre en el país. Al movimiento telúrico en sí y la destrucción producida se suman diversos eventos anexos, entre los que se destacan aludes y tsunamis.


La siguiente lista incluye a los principales terremotos que han azotado al país. En general, en Chile se considera como "terremoto" a los eventos sísmicos que superan los 7,0 grados en la escala sismológica de Richter. Sin embargo, no se listan todos los que han alcanzado dicha magnitud, puesto que muchos son réplicas de eventos mayores, mientras que otros no han sido de gran importancia al no tener efectos de gran consideración. Por otro lado, se han listado algunos eventos sísmicos que, aunque no han sobrepasado los 7,0 grados, sí han tenido notoriedad.


Catástrofes Naturales Zona Norte de Chile










Misión


Coordinar el Sistema Nacional de Protección Civil. Planificar, articular, impulsar y ejecutar acciones de prevención, respuesta y recuperación frente a situaciones de riesgo colectivo, emergencias, desastres y catástrofes de origen natural o provocados por la acción humana.

Visión estratégica


Contribuir al mejoramiento de la calidad de vida de la ciudadanía, incorporando un mejor control y/o manejo de riesgos en las planificaciones para el desarrollo sostenible, a nivel nacional, regional, provincial y comunal, fundamentalmente en este último, por constituir el contexto inmediato de la comunidad y por ello, el más adecuado para el perfeccionamiento de las medidas de seguridad y protección de las personas, de sus bienes y ambiente.La acción de ONEMI se sustenta en el Art. 1º, Cap. I de la Constitución Política del Estado de Chile que señala: "...es deber del Estado resguardar la seguridad nacional, dar protección a la población y a la familia...", lo que corresponde al ámbito de la Protección Civil, definida mundialmente como "la protección a las personas, a sus bienes y ambiente ante toda situación de riesgo, sea de origen natural o provocado por el Hombre, mediante una ejercitada planificación, que considere como sus principios fundamentales la Ayuda Mutua y el Empleo Escalonado de Recursos". La responsabilidad de la conducción nacional de la Protección Civil en Chile corresponde al Ministerio del Interior, la que ejerce mediante su servicio especializado: ONEMI

Objetivos estratégicos

ONEMI, Oficina Nacional de Emergencia del Ministerio del Interior, progresivamente instala un modelo de gestión que permite transitar de manera sostenida desde una visión de Caos / Mando / Control, hacia una visión de Continuidad / Cooperación / Coordinación, para anexar a la mera acción reactiva de manejo de emergencias, desastres y catástrofes, una gestión efectiva de prevención, a partir del manejo de riesgos, como aporte al mejoramiento continuo de la calidad de vida de los chilenos.Con esta visión de futuro, para el período 2008, la Institución se ha trazado los siguientes objetivos estratégicos:

Articular la gestión del Estado en manejo de crisis frente a amenazas de origen natural y humano



  • Fortalecer la organización del Sistema Nacional de Protección Civil, desconcentrando y potenciando la estructura organizacional de ONEMI, como órgano coordinador, con un enfoque integral, de carácter territorial y sectorial.

  • Perfeccionar el Sistema Nacional de Alerta Temprana a nivel nacional, para el mejoramiento continuo de la gestión de riesgos.


  • Desarrollar un proceso sistémico y continuo, de integración de la comunidad, enfocado hacia los sectores más vulnerables frente a emergencias, desastres y catástrofes.

Debemos Preocuparnos!!!...

Bienvenida

Bienvenidos al espacio de la Juventud Demócrata Cristiana Regional de Tarapacá Sur, este es un espacio de aportes y creación de un país mas solidario y humano.